Si has llegado hasta aquí es porque ahora mismo no estás en tu mejor momento y te sientes en una montaña rusa de emociones.
Soy María, psicóloga especialista en gestión emocional y ansiedad.
La gestión emocional es como el GPS de tus emociones. Imagina que eres el conductor de tu vida y las emociones son tus pasajeros. A veces, esos pasajeros pueden volverse un poco ruidosos, molestos o incluso incontrolables. Aquí es donde entra en juego la gestión emocional.
Es la habilidad que te permite lidiar con tus emociones de una manera más efectiva. Porque, vamos, todos hemos tenido esos días en los que nos sentimos como si estuviéramos en una montaña rusa emocional. La gestión emocional te da las herramientas para no solo sobrevivir a esos días, sino también para tener una mejor relación contigo mismo y con los que te rodean.
La gestión emocional es como la base de una casa sólida. Antes de construir cualquier otra cosa, necesitas una base fuerte, ¿verdad? Del mismo modo, antes de abordar cualquier problema o desafío psicológico, es importante tener una buena gestión de tus emociones. Imagina que vas a la terapia con un psicólogo.
Sin la gestión emocional, es como intentar armar un rompecabezas con las piezas esparcidas por todas partes. Con la gestión emocional, tienes más conciencia sobre tus emociones, lo que hace que sea más fácil trabajar en los problemas que te están afectando.
Esta primera cita sirve para conocernos y ver si puedo ayudarte en lo que necesitas.
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Dialogaremos por 20 min
Imagina que eres como un barco sin timón en medio de un mar lleno de emociones turbulentas. Eso es lo que sucede cuando no entiendes que te está pasando. Es un viaje confuso y agitado.
Cuando las emociones están en pleno control y tú no tienes ni idea de cómo lidiar con ellas, puede ser una situación en la que sientas miedo porque no entiendes la razón de estar así e intentas buscar una explicación, pero aún así ahí sigues en medio del mar sin timón.
Puedes sentirte abrumado por el estrés, la ansiedad, la tristeza o la rabia sin saber por qué. Puede que te encuentres llorando en la ducha un día y riendo histéricamente al siguiente, y sin un por qué aparente.
También puede afectar tus relaciones. Imagina tener una discusión con alguien y no entender por qué te sientes enfadado o por qué te duele.
La buena noticia es que no estás solo en este mar de emociones. Los psicólogos son como los navegantes expertos que pueden ayudarte a encontrar el rumbo y navegar junto a ti en las aguas emocionales, para que después puedas navegar hacia donde quieras sabiendo utilizar el timón de tu vida.
Te escribiré lo antes posible.
¡Me encantaría poder ayudarte!
